El día del 23 F me encontraba por la tarde en las cercanías de la plaza de Cibeles citado con otros compañeros fotógrafos para visitar un piso que queríamos alquilar a fin de constituir una agencia de prensa (que fundaríamos poco después como Penta Press), cuando nos enteramos por una retransmisión del comienzo de la toma del Congreso por los golpistas. Yo no llevaba el equipo fotográfico encima, pero alquilé un taxi para llevarme a mi domicilio que no estaba muy lejano a recoger mis cámaras y algo de carretes, esperándome en la puerta para conducirme luego a las inmediaciones del Congreso de los Diputados.

 

Cuando llegué antes de las 19h la situación no estaba clara, había dos cordones uno de policía nacional y otro interior de guardias civiles. Logré pasar el de policía pero resultaba claro que los guardias civiles no me dejarían pasar. También había bastante gente como espectadores, al gritar muchos de ellos contra el cordón de golpistas hubo una carga de los guardias civiles (tras una amenaza de efectuar disparos) y la multitud corrió dispersándose por las calles perseguida por los guardias civiles. Yo logré subir a un balcón de una pensión y hacer fotos de ese momento.

 

Luego cuando pude me dirigí a la Agencia UPI (united Press International) para la que colaboraba y que tenía sede en el Edificio de EFE en la calle Espronceda y entregué los carretes para su revelado y utilización informativa en la línea internacional de la agencia. Cuando luego intenté recuperar esos negativos al día siguiente me dijeron que habían desaparecido a manos de otros fotógrafos que llegaron de la sede de Bruxelas a las dos horas del golpe. Pedí más carretes para volver al Congreso y con muchas dificultades logré pasar varios cordones policiales que se habían establecido y llegar al hotel Palace, en cuyas proximidades pasé toda la noche y donde pude seguir documentando los eventos de esa noche hasta la mañana siguiente.