El Paralelo
Barcelona, 1975
Colita

“Hemos salido a la calle y nos hemos asombrado al ver tanto muslo suelto, tanto pecho agrandado, tanta pantorrilla pegada a las paredes y los faroles. No hemos visto mujeres, fíjense ustedes, sino trozos de mujeres”. Estas palabras de Maria Aurèlia Capmany se encuentran en el fotolibro que en 1977 hizo junto a Colita, titulado Antifémina, y donde se publicó esta imagen. Escritora y fotógrafa dan respuesta al “destape”: la brutal proliferación de cuerpos de mujeres desnudos en la cultura visual de los años setenta y ochenta, que era entendida por el movimiento feminista y gran parte de la población como una cosificación y clara objetualización de los cuerpos, una sexualidad hiper-presente y constante que surgía al tiempo que la censura iba languideciendo. En esta fotografía, Colita juega con un montaje disruptivo: en el mismo encuadre, en dos niveles contrapone dos realidades relativas a la feminidad que están colisionando en el momento. Una real (una de las realidades de la mujer al final de la dictadura) y otra imaginaria, en tanto imagen u objeto. Una de las fantasías propias de masculinidad que fue mostrada en grandes formatos en el espacio público, a través de carteles de los cines o en las puertas de los cabarets del Paral·lel de Barcelona, como es el caso.

El Paralelo. Barcelona, 1975 © Archivo Colita Fotografía