La coincidencia de la muerte de José Antonio (1936) y Francisco Franco (1975) un día 20 de noviembre, hizo que los nostálgicos del régimen franquista eligieran esa fecha para concentrarse en la Plaza de Oriente de Madrid, institucionalizando el 20N como símbolo de la repulsa al régimen democrático recién nacido tras la muerte del dictador, por parte de grupos neofranquistas que seguían apoyando el legado de Franco.

En la fotografía vemos un nutrido grupo de asistentes a la concentración con motivo del tercer aniversario de la muerte del Caudillo: “hoy más que nunca los españoles te recordamos” puede leerse en la pancarta que ocupa la parte inferior izquierda de una imagen que recorre con serenidad, en una composición tan fortuita como inesperadamente organizada, cientos de cabezas que se pierden en la línea del horizonte. Con una toma de angulación picada, la presencia de Franco y de la bandera de España en primer término establecen el contrapeso compositivo frente a la multitud, enfrentando la mirada del espectador con la de Franco, quien, desde la pancarta, mira directamente a cámara. El número de asistentes a la concentración se cifró en torno a 125.000 personas.

El acto comenzaba puntualmente a las 12.30h, siendo los oradores Jesús Evaristo Casariego de la Comunión Tradicionalista quien afirmaba que en España no había estado de derecho; Blas Piñar, Presidente de Fuerza Nueva que condenaba la política democrática o José Antonio Girón quien manifestaba la necesidad de enfrentarse a aquellos que querían para España una democracia de carácter marxista.